En un paisaje bucólico de la pampa argentina, articulada como una conversación ininterrumpida entre David, un niño que parece saberlo todo, y Amanda, una madre que yace convaleciente en un hospital, transcurre una especie de thriller de terror sostenido en apenas un centenar de páginas que se leen de una sola sentada. Pueden parecer pocas páginas, pero todo esta medido, concentrado y fragmentado para hacer de la lectura un disfrute consciente, repleto de simbolismos y metáforas que debemos escarbar para comprender.
«Lo llamo “distancia de rescate”, así llamo a esa distancia variable que me separa de mi hija y me paso la mitad del día calculándola, aunque siempre arriesgo más lo de que debería.»
La reconstrucción de la historia, realizada pregunta a pregunta, nos lleva hasta lo sucedido en los últimos momentos de Amanda. Desde su llegada al vecindario hace unos días, hasta su estancia en el hospital. Así se van revelando las respuestas para todos aquellos que estén atentos. Con la maternidad como eje de todo, dando vistazos a los diversos miedos de una madre, Samanta teje una trama que va mucho más allá y contempla un problema tan grande como es la amenaza ecológica que se vive en América latina. Los pesticidas y tóxicos en los cultivos que tantas vidas se han llevado hasta día de hoy. Sin embargo, no es su objetivo.
Con una trama cíclica, que nos anuncia su final desde el mismo principio, Distancia de rescate se va desarrollando como un trepidante texto laberíntico y repleto de preguntas a las que buscar respuesta. Elegante en estilo, medida en palabras como los cuentos de Siete casas vacías, la novela sobrevuela lo místico para jugar con nosotros desde el comienzo. El lector puede elegir entre creer o no creer en los conceptos que poco a poco se nos van desgranando. La contraposición de lo fantástico en una atmósfera tan real puede resultar forzada para muchos, pero no por ello desencajar con lo que cuenta.
Una consecuente cantidad de símbolos y metáforas plagan el texto, funcionando a modo de rompecabezas para el avispado lector. ¿Qué son esos gusanos que tanto se mencionan? ¿Es David real? ¿Por qué es tan importante esa distancia que separa a Amanda de su hija? Distancia de rescate crea intranquilidad en cada vuelta de hoja, deja la duda en todo lo que cuenta de forma natural y teje, una atmósfera de pura pesadilla que resulta difícil de olvidar. Sin embargo, llegar atento hasta su ansiado final tiene premio.
¡Hola!
ResponderEliminarNo lo conocía pero me ha picado la curiosidad. Son maravillosas esas novelas que se nos meten en la cabeza y cuando te quieres dar cuenta vuelves a transitar de nuevo por sus páginas. No he leído demasiado sobre la maternidad y me parece interesante que ese sea el eje sobre el que gira la narración. Muchas gracias por el descubrimiento.
¡Besitos!
Es un libro que atrapa desde la primera página y se lee de una sentada. Espero que lo disfrutes :)
EliminarHola, Mangrii:
ResponderEliminarLo tengo apuntado. Cuando lo lea intentaré estar avispada :-D
Un beso.
Espero que lo disfrutes, ya me contarás :)
Eliminar