La única criatura enorme e inofensiva
Brooke Bolander (Trad. de Carla Bataller Estruch)
Crononauta
Rústica / Digital | 136 páginas | 13€ / 3,61€
Brooke Bolander (Trad. de Carla Bataller Estruch)
Crononauta
Rústica / Digital | 136 páginas | 13€ / 3,61€
La ucronía es uno de los géneros literarios que más disfruto. Es verdad que no leo tanto como me gustaría, siempre es interesante ver como les autores cogen acontecimientos reales del pasado para moldear al antojo un futuro. O simplemente, especulan sobre realidades alternativas ficticias donde los hechos históricos han sido modificados. Y aquí es donde entra La única criatura enorme e inofensiva, la primera novelette de Brooke Bolander, en la cual reconstruye y mezcla dos hechos históricos (las chicas del Radio y la electrocución publica de la elefanta Topsy) para dar forma a una fábula triste y emocional, que muestra la crueldad humana y animal bajo el engañoso lema del progreso.
Cubierta de la edición inglesa
A través de cuatro vías
narrativas, que saltan de una a otra cada pocos párrafos, Bolander narra
cuatro historias que guardan una pequeña relación. La primera de ellas, el
relato de una Madre elefante y su trágica búsqueda para conservar todas
las Historias. Dos más, situadas en 1940, unen a Regan, una chica enferma
agonizando que trabaja sus últimos días en la fábrica US Radium enseñando a la
elefanta Topsy, una esclava comprada al circo, el mismo trabajo que la
matara tanto como a ella. El último punto lo tiene Kat, años en el
futuro, intentando hacer que los elefantes brillen de verde radioactivo para
advertir sobre los desechos nucleares de la tierra.
Bolander propone cuatro visiones que componen una
fábula siniestra, cruel y de lo más triste. Cuatro historias donde sobrevuela un ambiente enojado que fluye como un
alegato amargo y furioso del capitalismo y el poder. Una historia que versa
sobre los derechos humanos, de las mujeres y los animales, sobre las
barbaridades acometidas por los humanos en pos del progreso. Un conmovedor
discurso, enredado en una prosa metafórica, confusa y caótica a partes iguales,
que habla sobre lo que podría haber sido el curso de la historia si el ser humano no
tuviera la necesidad de imponerse limites por escrito para cumplirlos. Si todos
fuéramos más sensatos y defensores de la propia vida.
"«Os tengo que enseñar a morir», piensa Regan. «¿A qué es la gilipollez más grande que has oído en tu puta vida, eso de enseñar a un animal a morir? Todo el mundo sabe morir. Solo tienes que dejar de vivir y ya lo has aprendido en un santiamén.»"
La única criatura enorme e inofensiva no es una historia fácil. Tampoco apta para todos los paladares.
Aunque la introducción de Ainhoa Goñi hace mucho por situar al lector
aportando las claves históricas en los que se basa la novelette, los
frecuentes cambios de escena y el confuso tramo inicial no llegan a
engranar hasta más de la mitad del texto. Tampoco la unión final de sus hilos
es tan potente como pretende al inicio. Solo dos de ellos se integran con la
fuerza suficiente para resultar simbólicos (Regan y Topsy con su poder de decisión), mientras otros
dos se quedan sin enlazar con la resistencia necesaria para rematar el final a la altura de
la historia. En este sentido, el relato tiene su mayor fortaleza en dar a
conocer estos dos hechos históricos y unirlos de forma ingeniosa que en
presentar una historia redonda.
Ganadora del premio Nébula y
Locus en 2018 y 2019 respectivamente, La única criatura enorme e inofensiva
es una de esas lecturas peculiares que no puede faltar este año entre vuestras
lecturas. Es interesante, diferente a lo habitual, dura y presenta dos hitos
históricos -para nada conocidos por las masas- que se unen de forma habilidosa.
Es potente, trágica y con un discurso que resuena con fuerza en la sociedad que
nos ha tocado vivir.
Hola, Mangrii:
ResponderEliminarEste libro trata temas que me interesan mucho, pero si es tan triste no sé si me animaré. Veremos.
Un beso y gracias por compartir tu opinión.
Es una novela cuanto menos curiosa. Es durilla, extraña, pero merece la pena. Eso si, que te pille en un mejor momento :)
EliminarBuenaas!
ResponderEliminarLa verdad es que pinta bastante bien pero no creo que me anime a leerlo por ahora...
Gracias por la reseña <3
Gracias por comentar de todas formas :)
Eliminar¡Hola!
ResponderEliminarYo no conocía las historias reales que usa Bolander en esta novela corta, pero el prólogo de Ainhoa Goñi también me ayudó a desenredar la madeja que construye la autora. Yo disfruté mucho de esta obra, tal vez por ser diferente a mis últimas lecturas.
Está llena de ideas y algunas van más allá de las críticas manidas al sistema capitalista.
Un saludo.
Sin ese prólogo, la entrada en la novela sería ardua de narices. Por suerte desde Crononauta plantearon estupendamente la novelette con esa introducción. Me alegro de que te haya gustado tanto :)
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