Roald Dahl (Trad. de Mª Luisa Balseiro)
Santillana (Colección loqueleo)
Junto a grandes figuras como Lewis Carroll, Diana Wynne Jones, C.S. Lewis o Edith Nesbit, Roald Dahl es uno de los autores de literatura infantil más reconocidos a nivel internacional. Tanto es así que sus historias han sido traducidas a multitud de lenguas y gran parte de su obra ha sido adaptada a varios medios como cine, televisión y teatro. Británico de ascendencia noruega, sus historias siempre han estado rodeadas de fantasía, contadas desde el punto de vista de un niño, y con una gran cantidad de humor negro que pueden disfrutar tanto niños como adultos. En este caso, Las brujas es un claro ejemplo de estas tres características.
¿Y si las brujas de todo el mundo
estuvieran escondidas bajo la apariencia de señoras corrientes?Perturbador, cuanto menos, salir a la calle. Las brujas de
Inglaterra se han reunido para celebrar su convención anual en el Hotel
Magnifico, el mismo que nuestro protagonista y su abuela han escogido para sus
vacaciones. La Gran Bruja ha creado el Ratonizador de Acción Retardada que
permitirá a las brujas de Inglaterra terminar con todos los niños de su país
¿Serán capaces la abuela y su nieto de vencerlas?
Ilustración de Quentin Blake
Sin dejar de lado la popular
creencia del odio que tienen las brujas por lo niños, Roald Dahl nos regala una
nueva y actualizada visión de las mismas, que puede ser ciertamente terrorífica, pensándolo con calma. Las brujas no son aquellas que llevan sombrero
puntiagudo, una nariz prominente con su verruga verde, o que viste ropas
oscuras. Son señoras corrientes, de clase social alta, con guantes y pelucas,
que se esconden bajo esta mascara de la sociedad para ejecutar sus viles
planes. La imaginación de Dahl para construir la historia de forma sencilla
desde esa simple premisa, significa una forma genial de iniciar a los niños en la
lectura del género fantástico, y más en concreto, las brujas.
Un tema clásico dentro del libro
es el tema principal de la novela: la lucha del Bien contra el Mal. Dahl divide
a sus personajes en buenos y malos, donde el protagonista ejerce de héroe
clásico hasta terminar con el mal. Por eso la estructura del libro es simple
pero efectiva, donde lo que va a ocurrir en cada capítulo nos queda anunciado desde
el título del mismo, indicando al lector como la acción evoluciona hasta su
mismo final. Roald Dahl se sale de lo tradicional al definir tanto el tiempo y
el espacio de su obra, al igual que el mundo que rodea al lector. Por ello
visitaremos Oslo en Noruega, o Bournemouth en Gran Bretaña, lugares de
residencia del mismo autor. De esta forma el autor es todo un pionero al integrar la fantasía en ambientes reales y palpables.
Ilustración interior de Quentin Blake
"Da igual quién seas o que aspecto tengas mientras alguien te
quiera." Con esta cita en los últimos compases del libro Roald Dahl
resume el mensaje que nos quiere transmitir durante todo el libro. El autor
quiere que el niño comprenda que ser diferente al resto de sus amigos o
compañeros no tiene nada de malo, ni es digno de odios o insultos. Que el aspecto
de cada uno no es lo que nos define, es solo una cualidad más que debemos
apreciar. Todo un mensaje de tolerancia que debería grabarse a fuego en la
sociedad. Pero el autor habla sobre mucho más: la ausencia de los padres, los
vínculos familiares o la superación personal. Todos los temas se dan cabida de forma liviana, pero concisa y suficiente para dejar un poso en la mente del niño.
Dahl se salta los cánones
tradicionales también al dejar el libro con un final abierto. Toda la intención
puesta para que el niño pueda ser el propio protagonista de sus historias, algo
que se refleja en que el propio personaje no tiene nombre, más allá de chico o boy en el idioma original. También da pie a investigar sobre las
brujas de todo el mundo, sus mitos y sus leyendas. Cierran todo este cumulo de
imaginación y fantasía las maravillosas ilustraciones de Quentin Blake, que
suelen acompañar a todas las obras de Dahl, y que trasladan la escena
directamente a la retina. Infantiloides y asimétricos suelen ser este tipo de ilustraciones, como si un mismo niño
los hubiera hecho. Un acompañamiento perfecto para esta imprescindible
historia infantil.
Las imaginación de Roald Dahl
Como crea tanto con tan poco
Sus mensajes, sencillos pero efectivos
Las ilustraciones de Quentin Blake
Ojalá tuviéramos más aventuras
Aunque me de vergüenza reconocerlo,
es mi primer libro de Roald Dahl. Conocía su figura, conozco algunas de sus
historias por sus adaptaciones, pero nunca me he parado a leerlo. Craso error.
Dahl me ha demostrado que aún tengo mucho por descubrir en la literatura infantil,
con verdaderas joyas como esta. Una historia sencilla, con un mensaje claro y
directo, pero llena de imaginación y magia. Ahora me queda ver la película de
1991 “La maldición de las brujas” que adapta el libro, aunque ya me han dicho
que es bastante fiel.
Entre píxeles y páginas
Sentimiento lector
Hola querido koalita :3. Hacía tanto tiempo que no me pasaba por aquí que no sé si ahora has puesto los comentarios como "pendientes de moderación". En caso negativo me parece horrible que todavía nadie haya comentado esta magnifica reseña. Suscribo cada palabra, mis impresiones son exactamente las mismas.
ResponderEliminarEso sí, no me di cuenta mientras leía este libro a principios de 2017 de la importancia de Roald Dahl al ubicar el elemento fantástico con tanta relevancia en la trama en un mundo completamente realista. Por ejemplo en La hija del espantapájaros hay una fantasía, pero ésta es muy velada y secundaria dentro de un mundo realista, y yo no lo llamaría como tal. A veces me recuerda a una novela gótica con algún elemento sobrenatural. Luego hay novelas como las de Narnia en las que el mundo "real" aparece casi desdibujado, vamos, que no es relevante. A mi me gusta que la fantasía irrumpa en un mundo tan prosaico como el nuestro. ¿Has visto The song of the sea, verdad? Pues así me gusta.
El mensaje de "Las brujas" a mi me caló mucho mucho mucho. Fue por El viento en los sauces por lo que empecé a leer lit. infantil, pero al leer esta novela me dije: "Pues a lo mejor la literatura infantil es donde yo encuentro los mensajes que necesito". Me interesa el tratamiento que se da al tema de <>, ya sea la ausencia de este concepto como tal y la peculiar estructura que se forma o incluso desestructuración familiar. En fin, si te va este rollo también tienes que leer La hija del espantapájaros, que es maravillosísima. ¡Espero hablar de ella pronto, sí!
¿Si yo fuera una ardilla me querrías? ¿Te imaginas una ardilla con un vestidito victoriano subida en tu hombro? Madre mía, la atracción del Celsius xD.
El final abierto me parece necesario en esta novela, hay historias que lo demandan y esta es una de ellas porque me parece que si Roald Dahl hubiera seguido con ella la habría estirado como un chicle. De este modo, es lo que tu dices, queda al gusto de la imaginación del niño. Yo desde luego imaginé unas cosas muy "jartas".
Ay, ¡qué maravilla de novela!
Un besito, Sir Phascolarctos Cinereus. Muak.
Menudo comentario <3 Me encanta mi nuevo nombre. Fueras lo que fueras yo te querría a mi lado igualmente. La literatura infantil tiene multitud de mensajes, algunas escondidos, otros a simple vista, pero siempre están ahí. El viento de los sauces es un pendiente (y una necesidad) desde tu entrada :)
EliminarEste es uno de mis libros favoritos de mi infancia y no puedo contar las veces que lo he leído, me encanta la reimaginación que hace este libro de las brujas, con esas características tan peculiares y siniestras.
ResponderEliminarEs tan siniestro salir a la calle tras leerlo... Roald Dahl mola :)
EliminarMe encantan las brujas, de hecho conocía la peli (de oídas), no sabía que estuviera basada en este libro, que estoy seguro debe ser toda una joyita. Cómo me gustaría leerlo.
ResponderEliminarUn abrazo ;)
Te lo vas a pasar genial con el chico y su abuela :)
EliminarHola!!
ResponderEliminarCuando niña este era uno de mis libros favoritos y me daba mucho miedo las ilustraciones de las brujas x.x
La película también me encantaba :D
Saludos!
No me extraña, con esas rostros desfigurados. Tengo curiosidad por la película :)
EliminarHola!! Las Brujas es sin duda uno de mis libros favoritos. Sin duda uno de las historias que me convirtió en lector :)
ResponderEliminarUn abrazo!
Se que si lo hubiera leído de pequeño, también lo habría sido :)
EliminarAhhh qué recuerdos. Hay literatura infantil que quiero volver a leer :)
ResponderEliminarPues ya sabes, a por ello :)
Eliminarmalas las brujas maduro es una bruja porque si
ResponderEliminarbuena
EliminarWTF!
EliminarEste libro lo leí de pequeña y todavía me acuerdo perfectamente de muchas cosas del libro. Literatura infantil... el hecho de que los padres se maten en una carretera montañosa en los alrededores de Oslo y todo lo siniestro de las brujas no me parece muy adecuado para la infancia, a mi me dejó trauma y se me quitaron las ganas de visitar las carreteras montañosas de Oslo.
ResponderEliminar¡Qué novela Las brujas! Me gusta muchísimo por ser un libro que, sin dejar de ser para niños, es verdaderamente inteligente. Se trata de un libro que cuenta una historia divertida y con un mensaje muy serio ("no importa como te veas mientras tengas alguien que te quiera"), y que no por eso es dulzón, inocente o directamente tonto.
ResponderEliminarUn placer siempre encontrarse con Roald Dahl. SI me lo permites, dejo acá mi reseña de este libro: https://libreriadeurgencia.wordpress.com/2020/05/06/las-brujas-roald-dahl/