Juramentada, de Brandon Sanderson

Juramentada

Brandon Sanderson (Trad. de Manu Viciano)

Nova

Tapa dura | 1408 páginas | 32€

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Empezar la reseña de Juramentada, la tercera parte de una decalogía que ya lleva más de tres mil páginas impresas se me antoja una barrera casi insalvable, pero no imposible. Advierto desde aquí al lector que es probable que por primera (y excepcional) vez haya mínimos spoilers para futuros lectores de El archivo de las tormentas. Si solo te interesa saber que me ha parecido el (tocho) libro, puedes mirar las estrellicas. Si, unas cuatro largas estrellas como una casa. Han sido tres semanas viviendo en Roshar con una fiesta final de aúpa, de esas que no se olvidan. Sin embargo, el libro adolece de ser el tramo medio en este primer arco de cinco libros que componen la primera parte de la decalogía. Es un volumen que alinea las posiciones de todos los personajes, revela información imprescindible para la comprensión de la saga y funciona como conexión, como tramo medio, de lo que está por venir. Es un paso necesario, vital y de lo más disfrutable, repleto de momentos emocionantes.

¿Dónde estamos?

Juramentada arranca unos días después de los sucesos finales en Palabras Radiantes. La humanidad se enfrenta a una nueva Desolación. Los Portadores del Vacío han regresado, pese a la fugaz victoria de los ejércitos alezi comandados por Dalinar. Una violenta tormenta eterna de rayos rojos cruza todo Roshar una y otra vez cada pocos días. Mientras Dalinar intenta unir a todas las naciones de Roshar para luchar contra el mal común y el fin del mundo, Shallan se tratará de investigar la mítica fortaleza de los Caballeros Radiantes a la par que descubre oscuros secretos. Mientras, Kaladin, nuestro valiente guerrero, se enfrenta a la rabia de los antiguos esclavos del hombre: los parshendi.

Ilustración de Randy Vargas

Dalinar, el eje central

Como bien explico Sanderson en varias ocasiones, cada libro de El archivo de las tormentas esta centrado en un personaje. En esta ocasión, le toca a Dalinar, el Alto Príncipe de Alezkar. Revivir el pasado de Dalinar no es nada fácil. Es horroroso, cruel y cavernícola, pero necesario. Los flashbacks tendrán una  importancia vital a la hora de llegar al clímax final de Juramentada, dando lugar a una de las escenas más épicas que he leído en mucho tiempo. Sin embargo, algunos de ellos se convierten en los tramos más tediosos del libro, cortando el ritmo de otras acciones que parecen tener más interés. No obstante, no olvidemos que El archivo de las tormentas es una saga coral, y creo que Juramentada, es la que mejor representa ese papel en varios momentos.

Ya no solo tenemos recibiendo atención a un Kaladin de aventuras que vive estancado en su continuo debate moral, o mi querida Shallan y su perturbador estudio de la personalidad múltiple. Adolin, algunos miembros del Puente Cuatro, el siempre odiado Moash, mi querido Szeth o la resbaladiza Lift (que conocemos en Palabras Radiantes y la necesaria Danzante del filo), tienen puntos de vista propios que representan un porcentaje más en la exploración en esta enorme historia y universo. Puede que alguno de ellos sean partes un poco prescindibles en el total de Juramentada, que corten un poco el ritmo (como en la segunda parte del libro), pero le dan cierta diversidad tanto temática como geográfica que es de agradecer.

Portada completa de Michael Whelan

La épica acumulada

Si tuviera que definir Juramentada con una frase sería la de épica acumulada o la de fatiga por revelación. El ritmo de las 1400 páginas (¡que se dice pronto!) es un in crescendo irregular acumulado de pequeños momentos que nos llevan a la explosión final: 200 páginas de puro éxtasis. Revelación por aquí, batalla por allá, un poco de aventura por otros reinos y escena épica por acá. La sucesión de momentos finales es tan épica y demoledora, que puede llegar a pasar cierta factura emocional. La cantidad de microinfartos por minuto está asegurada. Sanderson juega con el lector presentando el camino, mantiene la tensión como nadie, y la hace explotar en una quinta parte del libro que difícilmente podrá olvidar ningún lector de la saga. Salta de un momento a otro, dentro de una espectacular batalla, donde cada tres párrafos están ocurriendo cosas en cada esquina. ÉPICO y agotador.

El de las revelaciones

El subtitulo de Juramentada bien podría ser el de las revelaciones. Por que aquí Sanderson ha revelado una ínfima parte del pastel, de eso estamos seguros. Sin embargo, nos ha vuelto locos a todos los lectores. La verdad tiene un peso mayor de lo que pueda parecer. Es una gran revelación que afectará al futuro de los personajes y el devenir de los acontecimientos. Una información inesperada, que trastoca todo lo que creíamos saber de Roshar y hasta de cierta parte del Cosmere. Y luego, por supuesto, revelaciones más pequeñitas que generan nuevas preguntas. Nuevas incógnitas que hacen de esta saga una de las más interesantes que he leído en mucho tiempo. Una de las pocas que mantiene mi interés día a día, con hambre de nueva información y teorías en cada momento.

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Las expectativas eran altas, nadie lo va a negar, pero Juramentada ha cumplido. Solo por esas 200 páginas finales merece la pena su lectura. Quizá su punto más flojo es su extensión, fácilmente recortable con algunos momentos que no llegan aportar más que detalles y a veces, parecen cortar la acción. Sin embargo, en Sanderson, aún el relleno es disfrutable. Rhythm of War está llamando a nuestras puertas ¿estáis preparados? Yo no.

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