Alicia Sánchez Martínez
InLimbo Ediciones
Rústica con solapas | 164 páginas | 15€
Cuando lo terrorífico se da la mano con lo perturbador. Cuando lo perturbador roza la línea ficticia de la realidad y se convierte en algo incierto pero palpable, resulta tan espeluznante y oscuro que todo se reduce a pura pesadilla. En esto se convierte la Cataluña imaginada por Alicia Sánchez en cada uno de sus relatos, un paraje urbano donde los elementos góticos más clásicos se mezclan con los modernos y exploran el poder de lo femenino desde varias perspectivas. Seis historias contundentes, navegantes entre géneros, que no son amables con el lector ni con sus personajes. Historias de seres que han sido maltratados e inadaptados, que buscan su lugar en un mundo que los rechaza de forma constante.
Hay humanos que mutan, seres malignos y oscuros que se alimentan de humanos, apariciones espectrales que cambian vidas y lugares encantados que metamorfosean destinos. La locura, las adicciones y lo sobrenatural se dan la mano con la historia y la realidad social más actual, mostrando la cara más siniestra y oscura de la ciudad en diferentes momentos temporales. El escenario más clásico de lo gótico se da la mano con lo policíaco y con la literatura de monstruos en seis historias que tienen como hilo conductor el dulce líquido, a veces es sangre y otras, como dice su sinopsis, leche o fluidos estrechamente ligados al cuerpo de la mujer.
Monasterio de Montserrat
Las protagonistas de Alicia Sánchez son mujeres imperfectas, egoístas e incluso cobardes, pero son ante todo, humanas. Los retratos de cada una de ellas no las muestran como seres de luz ni las máximas villanas, si no que tratan de indagar en sus ciclos vitales, en como gestionan sus miedos y recorren ese sinuoso camino que las llevan a convertirse (y descubrirse) en quién quieren ser. Con un enfoque de regusto a leyenda, donde la prosa es elegante, limpia y bella, cada historia nos sumerge en un mismo momento intemporal del que extraer el mundo emocional de cada una.
Pesadillas que navegan en atmósferas densas, como la que construye uno de mis relatos preferidos, La viuda negra, un thriller policíaco y sobrenatural digno de American Gods. También, de males y maldiciones que siguen durante los siglos, como las sagas familiares de locura que propone El fruto de mi vientre y esa maravilla que cierra el libro y da titulo al conjunto, El dulce líquido. Sin embargo, también hay lugar para parajes especiales, como el de la montaña de Montserrat que visitamos durante todo Las encantadas, o para transformaciones corporales, como la que propone Piel de sapo. Bienvenidos a esta sala de espejos repleta de pesadillas creada por Alicia, donde el principal objetivo es reflejar el lado más oscuro del universo femenino con la fuerza poderosa de la literatura gótica ensamblada por los temas más actuales.
Otras reseñas de interés:
Gracias por la info, pero esta vez no me convence. Un beso.
ResponderEliminarGracias por pasarte y comentar :)
Eliminar