Tim Pratt
Angry Robot
Rústica / Digital | 272 páginas | 14,99€ / 6,99€
¿Qué harías si cada vez que te despiertas apareces en un universo diferente? Esa es la pregunta a la que Tim Pratt, con toda su imaginación y creatividad habitual, trata de dar respuesta en Doors of Sleep, la entretenidísima primera entrega (de dos) de Los diarios de Zaxony Delatree. Cientos de mundos, completamente diferentes entre sí, se dan la mano con la aventura en una novela que difumina las líneas entre la ciencia ficción y la fantasía en su forma más clásica. Utilizando parte de los relatos sobre el personaje publicados en su Patreon, Doors of sleep nos lleva de un universo a otro viajando continuamente en una especie de TARDIS rota sin rumbo fijo que visita tantos (o más) mundos que Quinn Mallory en Sliders. Una premisa atractiva a la que Tim Pratt sabe sacar todo su jugo, tanto para disfrute y entretenimiento del lector como para acudir a una clase magistral de creatividad.
A golpe de mundo(s)
Esta es la situación. Cada vez que me quedo dormido, me despierto en otro universo. Eso empezó a suceder hace casi tres años y mil mundos, y todavía no sé por qué, ni qué sucede durante la transición mientras estoy dormido. La primera frase de Doors of Sleep nos mete de lleno en situación: Zax Delatree, cada vez que se queda dormido, viaja a una nueva realidad. No tiene control sobre su destino. A veces se despierta en utopías tecnológicas posteriores a la escasez, a veces en mundos de pesadilla repletos de depredación y terror, a veces en una naturaleza prístina, a veces en estaciones espaciales abandonadas y, a menudo, en realidades mucho más extrañas.
Sin embargo, y afortunadamente, no siempre está solo. Puede llevarse a personas con él si están inconscientes en sus brazos cuando se queda dormido. Como es el caso de Minna, a la que acaba de conocer en un mundo nuevo. Pero alguien no deseado de su pasado lo persigue y busca algo de lo que Zax no puede prescindir: la sangre que corre por sus venas y el poder de viajar a través de mundos. En cada realidad, hace todo lo posible por ayudar a las personas que conoce y si encuentra a alguien o algo que quiere visitar un mundo nuevo, se lo lleva —con permiso, claro— con él a través de los mundos. Sin embargo, esta persona que lo persigue, conocida como el Lector, quiere acabar con todo y forjar un imperio.Y Zax, se siente con el deber de evitarlo a toda costa.
Timeline en la serie Loki
Creatividad por encima de todo
Si hay un elemento que brilla en Doors of Sleep es la construcción de mundos. Todos son completamente diferentes, fascinantemente imaginativos y vibrantes a su manera. Uno puede pasar por alto el ritmo irregular de la narración y el que la novela tarda unos capítulos en arrancar solo para dejarse deleitar por la creatividad de Tim Pratt. No hay límites de presupuesto y todo es posible. Contada en primera persona a través del diario de Zax, aunque no siempre escrito por él, viajamos de un mundo a otro cada pocas páginas —o párrafos— con Zax y sus acompañantes como vínculo. Cuando lo conocemos, Zax no es exactamente un novato en lo de saltar entre mundos. Ha estado viendo mundos nuevos y extraños todos los días durante algunos años y como resultado, ha luchado y experimentado el dolor de la pérdida cientos de veces, algo que iremos descubriendo poco a poco.
Si hay un elemento que brilla en Doors of Sleep es la construcción de mundos. Todos son completamente diferentes, fascinantemente imaginativos y vibrantes a su manera. Uno puede pasar por alto el ritmo irregular de la narración y el que la novela tarda unos capítulos en arrancar solo para dejarse deleitar por la creatividad de Tim Pratt. No hay límites de presupuesto y todo es posible. Contada en primera persona a través del diario de Zax, aunque no siempre escrito por él, viajamos de un mundo a otro cada pocas páginas —o párrafos— con Zax y sus acompañantes como vínculo. Cuando lo conocemos, Zax no es exactamente un novato en lo de saltar entre mundos. Ha estado viendo mundos nuevos y extraños todos los días durante algunos años y como resultado, ha luchado y experimentado el dolor de la pérdida cientos de veces, algo que iremos descubriendo poco a poco.
Sin embargo, eso hace que Zax sea un personaje peculiarmente positivo por cómo enfrenta cada nuevo mundo como una nueva oportunidad de dejar las cosas mejor que cuando llegó. Cada vez. Al contrario que el “villano” de la historia, el primer instinto de Zax es tratar de convencer a las personas de que sean mejores versiones de sí mismos y ayudar a la gente a mejorar las cosas. Todo ello a pesar de lo lejos que está de casa y de lo poco probable que alguna vez se beneficie personalmente de ello. ¿Cómo te sentirías si eres un viajero que tiene que seguir moviéndose hacia adelante, sin nunca echar raíces ni establecer apegos permanentes? Podría hacer casi cualquier cosa y escapar de las consecuencias, pero decide no hacerlo. Eso, junto con el triunvirato carismático de personajes que protagonizan la novela, son el ingrediente vital de Doors of Sleep.
Fragmento de Prison of sleep
El misterio multiversal
Si bien la construcción de mundos imposibles y los personajes son los dos pilares que sostienen a Doors of Sleep junto con el sentido de la aventura, la tercera pata es el creciente misterio sobre este multiverso que se nos plantea en el tramo final. Aunque las reglas están claras desde un principio y el conflicto de adaptarse continuamente a su entorno genera una gran tensión dramática y adicional a su lucha con el Lector, la deriva rocambolesca por este multiverso infinito parece —finalmente— tener un sentido de dirección y propósito. El factor sorpresa es simple, como si fuera una maldición y bendición a la vez, en un avance constante entre nuevos mundos a los que nunca puede volver. Sin embargo, el tramo final, empieza a abrir más hilos narrativos que a cerrarlos. Algunas de las respuestas e incógnitas planteadas por Zax y sus amigos llegan a resolverse, pero otras se plantean mucho más grandes e interesantes para cerrarlas en esa segunda parte titulada Prison of Sleep que pienso leer próximamente.
Si bien la construcción de mundos imposibles y los personajes son los dos pilares que sostienen a Doors of Sleep junto con el sentido de la aventura, la tercera pata es el creciente misterio sobre este multiverso que se nos plantea en el tramo final. Aunque las reglas están claras desde un principio y el conflicto de adaptarse continuamente a su entorno genera una gran tensión dramática y adicional a su lucha con el Lector, la deriva rocambolesca por este multiverso infinito parece —finalmente— tener un sentido de dirección y propósito. El factor sorpresa es simple, como si fuera una maldición y bendición a la vez, en un avance constante entre nuevos mundos a los que nunca puede volver. Sin embargo, el tramo final, empieza a abrir más hilos narrativos que a cerrarlos. Algunas de las respuestas e incógnitas planteadas por Zax y sus amigos llegan a resolverse, pero otras se plantean mucho más grandes e interesantes para cerrarlas en esa segunda parte titulada Prison of Sleep que pienso leer próximamente.
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