Andy Remic (Traducción de José Ángel de Dios)
Dilatando Mentes Editorial
Fantasía heroica cogida de la mano con vampiros mecanizados era la premisa cuando abrí La leyenda de Kell, primera parte de la trilogía Las crónicas de los Mecavampiros. Más o menos, eso es lo que me ha dado. Rindiendo un homenaje a el Ciclo de Drenai (Gigamesh) de David Gemmell y a las aventuras pulp de Conan el Barbaro, Andy Remic nos sumerge en la historia de un héroe que es obligado a salir de su retiro tras diez años de inactividad debido a una terrible invasión. La tierra de Falanor está siendo invadida por el Ejercito de Hierro, una armada de soldados albinos que rinden favores a los mecavampiros, una sociedad de vampiros que han fusionado su organismo con un intrincado sistema de relojería que funciona con aceite de sangre mágico. Tan solo Kell con su despiadada hacha Ilenna, su nieta Nienna, su amiga Kat y un pretencioso dandy llamado Saark, harán frente a la amenaza para avisar al rey de lo sucedido embarcándose en una serie de aventuras que los enfrentarán a las más temibles y feroces criaturas.
Remic nos sumerge en un hack
and slash continuo, de ritmo implacable, sin dar casi un respiro entre una
escena de acción y la siguiente. Esto hace la novela entretenida, que se
devoren las páginas sin parar, pero es odiosa la sensación de terminar siempre
cada capítulo en un cliffhanger, es
como un coitus interruptus continuado que incluso al final de la novela nos deja totalmente colgando. La trama es básica
y tira de algún que otro deux ex machina,
pero es útil al igual que sus personajes, los cuales encajan perfectamente en
la historia que nos cuenta pero no van más allá, no logramos
tridimensionalizarlos, son como personajes de cartón piedra. A medida que pasa
el libro esta sensación se va diluyendo un poco, empezamos atisbar algo detrás
de algunos miembros protagonistas, algunas sospechas nos son desveladas y otras quedan como incógnita para futuros volúmenes. Es como una película de serie
B de ritmo endiablado donde la violencia, sangre y sexo brotan en pantalla por
doquier, un entretenimiento para unos días lectores de desconexión donde solo
se busca pasar páginas y sobre todo divertirse.
El mundo que plantea Remic se inspira hacia lo clásico dentro
de la fantasía, con una sociedad heterpatriarcada de inspiración norteña. Lo
que más me intereso dentro de este mundo es el concepto de esos vampiros
mecanizados. Son una sociedad con una religión propia, que expulsa y destruye a
los impuros, que transforma sus defectos de fabricación en máquinas de
destrucción brutal y que tiene una jerarquía muy intrincada gobernada por los
Ingenieros y Relojeros. Es por ello que los capítulos en los que Anukis, la
protagonista en el Valle de Silva y cuna de los mecavampiros se hacían los más
interesantes. Ahí es donde recibía algunas respuestas a mis preguntas
sobre estos seres, sobre su origen, sobre su creación y funcionamiento. También
tengo que admitir que ese ejercito albino o algunas de las criaturas que
aparecen por el medio de la acción son una interesante fuente de creatividad,
que hacia las escenas de lucha mucho más interesantes.
Si en algo destaca el libro es en
su alto contenido de acción y sangre. Remic
satura al lector con una escena tras otra de lucha, con una carnicería continua
que pretende crear una atmósfera de terror. Al mismo tiempo lo hace
entretenido, con verdadera aventura y creando una lectura ligera pero
suficiente para mantenerte comprometido con ella. Por último, tengo que
recalcar la edición que Dilatando Mentes
nos ha traído a España, de nuevo excepcional. Un prólogo escrito por el propio Andy Remic, ilustraciones que recalcan
bien el espíritu de la obra realizadas por Daniel
Medina Ramos, un mapa que nos guía por los diversos parajes que se mueve el
grupo protagonista, una lista musical para escuchar a través de Spotify y un ensayo final sobre Fantasía
y épica realizado por el editor y traductor Jose
Ángel de Dios que me ha gustado mucho, y del que me he llevado unos cuantos
títulos clásicos anotados para futuras lecturas. Espero 2018 para sumergirme en Ladrones de almas, su segunda parte.
Las escenas de acción
El misterio tras los Mecavampiros
Un entretenimiento y pasapáginas
La edición
Algún Deux ex machina rechinante
Personajes cartón piedra
Entretenida es la palabra, como
es la que describía a las aventuras pulp
antiguamente. Remic nos plantea una
historia pasapáginas de acción, como la típica película de fantasía. En este
caso hacer retornar de su jubilación a un viejo y poderoso guerrero es
divertido, aunque el elemento steampunk
de esos vampiros sea lo que realmente me llamo más la atención. Acción, sangre,
violencia, sexo, magia y unas cuantas páginas para pasar el rato sin pensar
demasiado.
¡Muchas gracias a Dilatando Mentes Editorial por el ejemplar!
Pinta a lectura entretenida para pasar el rato esos días que no te apetece pensar demasiado. Creo que podría llegar a gustarme, así que me lo apunto.
ResponderEliminarSaludos
Perfecta para ello, espero que la disfrutes :)
EliminarAunque no la veo mal.....no sé si es el tema o la trama que no me acaba de decir léeme.
ResponderEliminarUn beso!
Gracias por pasarte igualmente :)
EliminarMis gustos literarios no coinciden mucho con los tuyos, y para ejemplo este libro. He de reconocer que el argumento parece original, pero no lo acabo de ver para mí. Parece una historia muy rara xD
ResponderEliminarBesos!
Es fantasía clásica épica, acción a raudales de toda la vida :)
EliminarHola!
ResponderEliminarVamos... que se ha quedado en medio. Entretenida y ya.
Es una pena porque el mundo y todo eso de los Mecavampiros sonaba de lo más prometedor.
Un beso ^-^
A mi me habían prometido acción y vampiros mecanizados, y eso he tenido. Espero más info sobre ellos en los dos siguientes volúmenes :)
EliminarHola, Mangrii!
ResponderEliminarCuando leí lo de los vampiros mecanizados ya me eché para atrás (yo es que con esto de los vampiros soy muy mía XD) , y luego lo del sexo y la violencia ya me dejó claro que este libro no es para mí.
Besos.
Gracias por pasarte igualmente :)
EliminarLo de vampiros con cuerpos mecanizados me ha transportado a esas producciones niponas de serie B que empezaron a llenar el mercado en los 90. Es una fusión extraña, y no me importaría darle una oportunidad (a veces las aventuras clásicas llenas de violencia, sangre y sexo sin tampoco necesidad de mucha profundidad es justo lo que nos hace falta para evadirnos unos días), si no fuera por la baja nota que le pusiste, que hace que me desencante un poco.
ResponderEliminarUn abrazo ;)
Pues totalmente es algo como eso. Aventuras, sangre y sexo con unas seres un tanto perturbadores :)
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