Entradas

El Gran Maestro de la Cultivación Demoníaca Vol. 1, de Mo Xiang Tong Xiu

El gran maestro de la cultivación demoníaca Vol. 1 Mo Xiang Tong Xiu (trad. de Javier Altayó) Norma editorial Rústica / T. dura / digital | 18,95€ / 25,95€ / 9,99€ Como lector que siempre está buscando sorprenderse, que algo nuevo aterrice en nuestro mercado siempre me causa (cierta) curiosidad. En el caso de danmei , más que curiosidad, era intentar entender por qué mi mejor amiga (hola, Iara ) era tan adicta a estas historias y más en concreto, de la que hablaré hoy: El Gran Maestro de la Cultivación Demoníaca . El danmei , para los que como servidor tampoco lo sepáis y meternos en materia, es un género que nació — como casi todo— en internet, originalmente en formato digital y englobando tanto novelas como cómics u otros formatos donde se representan relaciones afectivas entre personajes masculinos. Sin embargo, como todo género literario, cuenta a su vez con diferentes temáticas y divisiones. El Gran Maestro de la Cultivación Demoníaca , por ejemplo, pertenece al Xianxia , donde l

Sobre el acto de leer (y otras cuestiones)

El pasado domingo 16 abría mi cuenta de Twitter (que siempre se llamará así) y veía, mientras tomaba mi café y hacía scroll por mi pantalla como cada mañana, una publicación de Rosa Montero . En ella nos llevaba a su columna habitual en El País, y mientras clicaba en ella — entre intrigado e hipnotizado— por su título, tan simple y llamativo como es Leer , mi lóbulo frontal ya se había activado regurgitando una idea. O, más bien, podría decirse, una reflexión que arrastraría los siguientes días en la cabeza. ¿Qué significa para mí leer y que creo que supone (o puede implicar) para la vida de las demás personas? ¿Por qué resulta una actividad tan importante para algunos y la desidia absoluta para otros? ¿Cuánto ha cambiado mi vida por el simple (y complejo) acto de leer a diario? Obviamente, no tengo  —ni me atrevería— una respuesta completa ni categórica para ello. Pero si hubo frases en la columna de Rosa Montero que atravesaron mi caja torácica y fueron capaces de conectar con algo

Crónica de dos noches sin verano, de Inés Galiano

Crónica de dos noches sin verano Inés Galiano Literup Rústica / digital | 218 páginas | 14,99€ / 2,99€ ¿Puede una reunión sobrenatural, una convención de vampiros y licántropos concretamente, suceder en Murcia? La respuesta, según Inés Galiano (flamante ganadora del Ignotus el año pasado por Proyecto Ketchup ) creo que es: ¿por qué no? O al menos, así lo demuestra su Crónica de dos noches sin verano , que lejos de ser un homenaje a El sueño de una noche de verano de William Shakespeare, se refiere al “Año sin verano” en el que se escribió Frankenstein (Mary-Shelley) y El Vampiro (Polidori), ese 1816 en que las temperaturas resultaron inusualmente bajas y Villa Diodati ejerció como lugar de creación y punto referencial de la literatura. En un homenaje, repleto de humor y guiños, la Crónica de dos noches sin verano de Inés ejerce como legado actualizado de los mitos y pone un gota de su parte,la del humor, formulando una fantasía urbana donde la propia autora es la primera —antes q

La bahía del espejo, de Catriona Ward

La bahía del espejo Catriona Ward (trad. de Cristina Macía) Runas Rústica / digital | 328 páginas | 21,95€ / 11,99€ Uno de los nombres más reconocidos — al menos en España— del panorama de terror internacional es el de Catriona Ward . Cada nuevo libro que nos llega se celebra como un evento mismo en la comunidad del fantástico. Sin embargo, servidor tras el teclado, reconozco (como hice en la reseña) que  La casa al final de Needles Street nunca fue un libro que llegó a conquistarme del todo. Quizá llegué —demasiado— tarde a ella, tras escuchar y leer a otros hablar —demasiado— del libro. Quizá. Fíjate lo que supone una experiencia de lectura, que aún atrayéndome sus premisas y animándome algunos comentarios, sus libros se iban quedando en mi pila de forma inexorable. Cosas de la vida, haber entrado este año a formar parte de la Academia de los Premios Kelvin 505 (gracias eternas Cristina, Diego y Jorge Iván)  La bahía del espejo subió a lo alto de la pila como una de las cuatro no